lunes, 25 de noviembre de 2013

Los gran olvidados...los guantes y el lavado de manos

Hoy, después de una sesión intensiva de prácticas en el hospital, quería hablaros sobre el uso de los guantes y del lavado de manos, maniobras que seguramente os llevan hablando en toda la carrera, recalcando la importancia de su uso y que.....en el hospital al fin y al cabo, no se usan.

Con esto no quiero generalizar que todos los profesionales de enfermería no usen guantes o no se laven la manos, solo digo que por lo que vi en estos días en las prácticas en el hospital, de igual 30 veces que había que usar guantes o lavarse las manos...solo 10 se hizo tal cosa.

Por eso hoy os quiero explicar a groso modo en qué consiste cada cosa y recalcar la importancia que tienen, empezando por el lavado de manos y finalizando con el uso de guantes.

El lavado de manos con agua y jabón es el método más conocido y sencillo para evitar la transmisión de microorganismos de un paciente a otro y es un proceso que consiste en la frotación vigorosa de las manos, previamente enjabonadas seguida de un aclarado con agua abundante, con el fin de eliminar la
suciedad, materia orgánica...y así evitar la transmisión de microorganismos entre nuestros pacientes. Hay varios tipos de lavado de manos dependiendo de la intervención que vayamos a hacer, pero independientemente del tipo de lavado, siempre hay que tener en cuenta una serie de generalidades como por ejemplo: mantener las uñas cortas y sin esmaltes, facilitando así la limpieza de las mismas; no usar anillos, relojes ni pulseras que actúan como reservorio de gérmenes, dificultando la limpieza de manos y muñecas o utilizar jabones para el lavado con lanolina o cremas hidratantes (que obviamente ya se encuentran en el hospital) para aumentar la integridad y la resistencia de la piel, disminuyendo la posibilidad de contaminación por gérmenes.

Los guantes son una barrera física que protege tanto a los trabajadores sanitarios y a los pacientes. Antes de su uso se recomienda elegir el guante adecuado para la actividad a realizar y la talla de guante y material. Y aquí he de recalcaros que el uso de guantes NO sustituye el lavado de manos, el cual se realizará antes e inmediatamente después de su uso y también que la frecuencia de cambio teóricamente es entre un paciente y otro, cosa que yo no lo he visto hacer en el hospital. Al igual que el lavado de manos, hay varios tipos de guantes, pero yo solo os voy a hablar de los de látex, que son los que más se usan en planta.

Los guantes de látex son una barrera efectiva frente a agentes patógenos sanguíneos y otros agentes infecciosos. Los puede haber con polvo o sin polvo y estériles o no estériles.

Los no estériles están destinados para tareas de enfermería que no condiciones estériles como extracciones sanguíneas, retirada de vías periféricas, manejo de secreciones... Y aquí he de añadir de las 7 vías que he visto poner por ahora, solo 2 han sido con guantes, cosa que está muy mal porque como ya hemos dicho los guantes también actúan como una barrera que nos protege de las posibles enfermedades que pueda tener nuestro paciente y como tengamos una herida en la manos y esta misma entre en contacto con la sangre del paciente con una enfermedad contagiosa...adiós pedrín. ¡¡ Así que pónganse siempre guantes !!

Los estériles son destinados para uso quirúrgico y técnicas asépticas de enfermería (curas) y a continuación os muestro un vídeo muy ilustrativo de cómo hay que ponerse los guantes estériles para así no romper las condiciones de asepsia:


Pues espero que os haya servido de ayuda y que os haya quedado clara la importancia de ambos procedimientos.

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