Han sido cuatro semanas espectaculares, en las que he aprendido tantas cosas que jamás podré agradecer lo suficiente.
Sé que aún me queda una semana, pero será una de las más emotivas. Será despedirme de todos los que pasaron por mi vida estas semanas, y de desear lo mejor a todos los que aún están "pochitos".
No puedo expresar lo mucho que me he gratificado en estas semanas, ni lo mucho que he hecho. Ni lo mucho que he crecido. He encontrado vidas, he encontrado personas. Cada uno con su propia historia y con sus propias vidas; y que me permitieran entrar en ellos y descubrir la magnificencia del ser humano es algo increíble.
Y sí, estoy adelantando un poquito el final, pero porque quiero ir ordenando todos mis pensamientos desde ahora, porque sé que el último día será algo tan sumamente emotivo que no prometo contener ni una lágrima.
Y para endulzarme un pelín la despedida, mi "amigo" Mika tiene una buena canción para ello:
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