lunes, 25 de noviembre de 2013

Cuando el milagro de la ciencia se une al milagro de la vida.

Hoy os quiero contar la historia de Miles, un pequeñajo que tenía mucha mucha mucha prisa por venir al mundo, a pesar de la que está cayendo. A eso le llamo yo un valiente. Miles quería salir tan pronto que se le olvidó que aún le quedaban 3 meses y medio más para seguir "durmiendo". Vamos, un madrugador en toda regla. Pero Miles salió adelante. Vaya, como si no hubiera nacido tan prematuro. Este milagro fue posible gracias a todo el equipo sanitario del Nationwide Children’s Hospital en Columbus, Ohio, en dónde mantuvieron viable a Miles, quien ahora cumple felizmente su primer añito de vida, en compañía de los suyos. 
Es ovibio que la ciencia es un milagro, es increíble poder mantener con vida y sacar adelante a un pequeñajo (nunca mejor dicho) que sólo ha tenido 5 meses y medio de tiempo para "madurar" (no me malinterpretéis, quería darle un toque cariñoso, como si fuera un pequeño melocotoncito). Por otro lado, lo emotivo de la noticia es su padre, Benjamin Scott, fotógrafo de profesión, quien retrató todo el proceso de crecimiento de la persona más importante de su vida; su pequeño Miles. 
Y no quiero liarme más, así que os dejo el vídeo, que a pesar de ser un poco largo, es preciosísimo.
El vídeo fue subido hace tres días (22 noviembre) y ya tiene en Youtube más de un millón de visitas. Merece la pena verlo :)





2 comentarios:

  1. Ya había visto la noticia y me impactó mucho, pues un bebé tan prematuro y que salga adelante es increíble, aunque me alegro de que sea cierto y posible.
    ¿Como vivirías tu desde el punto de vista de una enfermera la situación si estuvieras implicada en este caso? ¿Tendrías esperanzas desde el principio de que las cosas salieran bien?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Vaya, curiosa pregunta. La verdad es que siempre tienes el miedo de que no sobreviva, aunque bueno, teniendo a favor toda la tecnología que tenemos y teniendo en cuenta que ese "enanito" tendría a toda una cohorte de enfermeras y médicos pegados al cristal de la incubadora... estaba en buen sitio. En cuanto a las esperanzas... muchas veces no las tienes, pero te haces por tenerlas. No por ti, sino por los padres, porque en esos momentos necesitan alguien en quién apoyarse y tienes que darle la seguridad de que todo saldrá bien. Pero por mucha mano humana que haya, sin toda esa tecnología detrás, sí que sería inviable :)

      Eliminar